martes, 25 de febrero de 2014

Original contra remake - Perfect Blue Vs. Cisne negro


Inauguro nueva sección, y como ya se podrá adivinar por el nombre, se tratará de juzgar las películas originales contra sus nuevas versiones. Hay quien no acepta la existencia de los remakes, y hay quien se alegra de ver historias que le gustaron en el pasado con las tácticas narrativas modernas o de Hollywood. Como en todo en esta vida, los hay buenos y los hay malos, y yo estoy aquí para dar mi opinión de ambas.

Comienzo con una comparación con una adaptación que no mucha gente sabe que es una adaptación: Perfect Blue de Satoshi Kon contra Cisne negro de Darren Aronofsky. No se trata de una adaptación literal, ya que es sabido que Aronofsky compró los derechos de la película japonesa para integrar detalles en sus películas (aunque finalmente solo lo utilizó para una secuencia de Requiem por un sueño). Sin embargo, varios años después, decidió al fin dedicarse a su adaptación, pero cambiando por completo el contexto de la trama y añadiendo detalles propios.

Sin más, vamos con la comparación.


Apartado visual
Evidentemente, en Perfect Blue parten con la ventaja de ser una película de animación, por lo que pueden permitirse hacer cosas que una película de presupuesto tirando a bajo (13 millones de dólares, bastante poco si tenemos en cuenta que gran parte de ese dinero sería para Natalie Portman) ni podrían soñar en hacer. Veremos multitud de virguerias: grandes panoramicas, muchísima gente en escena, colores bien resaltados... por desgracia, Perfect Blue tiene un mal muy típico en el anime japonés: la animación pobre. Será común ver a un personaje que mantiene una conversación no se moverá, a excepción de la boca. Si, es cierto que en los momentos más espectaculares se verá una calidad de animación bestial, pero no deja de ser una pequeña parte de la película.

Cisne negro, en cambio, tiene un apartado visual (en apariencia) más sencillo. Rara vez veremos predominación de colores, panorámicas del paisaje ni florituras artísticas. Que no se me confunda, la fotografía es fantástica, pero no tiene el dominio hipnótico que si tiene Perfect Blue.

Por ello, a pesar de su irregularidad, Perfect Blue gana este apartado.



Apartado sonoro
No sé como será la versión original, pero la versión doblada de Perfect Blue al castellano tiene un doblaje cuanto menos, regular. No es ni de lejos el peor doblaje que he oído, pero entre que no todos los personajes tienen una voz acorde y que no siempre le ponen la emoción necesaria, me saca mucho de la película. Y es una pena, porque la banda sonora no está nada mal.

En cambio, Cisne negro es simplemente genial. El doblaje tampoco es mucho mejor que en Perfect Blue (nunca me ha gustado la voz de Natalie Portman doblada), pero la música de Clint Mansell es tan genial, que es casi imposible de superar. Es más, casi diría que es una de las mejores bandas sonoras que he escuchado en película alguna. Y no solo por la calidad de las composiciones, si no por como está integrada en la película.

Perfect Blue tiene un buen apartado sonoro, pero no tiene nada que hacer contra Cisne negro.



Actuaciones
A pesar de que antes he dicho que la animación de Perfect Blue es deficiente por momentos, en lo que respecta a dotarle de emociones a la protagonista, es sin duda notable. Como bien sabemos, pasará por varios estados de ánimo completamente distintos entre sí, y todos y cada uno de ellos estarán perfectamente caracterizados. Solo con ver la expresión de los ojos de Mima ensayando para su primer papel (cuando repite una y otra vez "¿quién eres tú?") ya nos queda claro que en lo que se refiere a expresarnos estados de ánimo, los animadores han hecho un trabajo genial.

Pero claro, no hay nada que unos buenos animadores puedan hacer contra una buena actuación de una actriz real. Y pedazo de actriz. En principio, veremos a Natalie Portman forzada, falsa, fría. Pero a medida que avance la película, veremos que si hemos visto esos sentimientos en su rostro, es porque ella lo ha querido así. El Oscar que ganó en 2011 por su actuación es esta película está considerado como uno de los más merecidos de los últimos años, y no puedo estar más de acuerdo. Simplemente, una de las mejores actuaciones que he visto jamás.

Ambos están a un nivel muy alto, pero la labor actoral de Cisne negro gana a la expresividad de Perfect Blue.



Historia
En el caso de Perfect Blue, es muy fácil empatizar con la protagonista, pues es una chica a la que le gusta socializar y expresa sus sentimientos. Por ello, es más fácil entrar en la historia. Por desgracia, su final no acaba de ser satisfactorio, ya que tras mostrar una trama extremadamente enrevesada, tiene un final muy cerrado, y porque no decirlo, demasiado feliz. Puede que sea problema mío, pero hubiese cortado los últimos minutos.

En cambio, en Cisne negro también tenemos un final es bastante cerrado, pero a diferencia de Perfect Blue, es muy difícil empatizar con la protagonista, ya que no sabremos nada de su vida fuera del ballet, lo que hace que sea mucho más difícil para el espectador adivinar su próximo movimiento.

A pesar de que el final de Perfect Blue no me acaba de gustar (en contrapunto con Cisne negro, que me parece sublime), por su mayor complejidad en este apartado, gana Perfect Blue.



Dirección
La dirección de Perfect Blue tiene algo muy particular en el cine de animación: lo que rodea a la protagonista habla sobre ella, ya que no siempre lo que ella ve es lo que está pasando. Por ello, aunque en la animación no exista el trabajo de fotografía, da la sensación de tenerlo gracias a la importancia que se le da al entorno. Evidentemente, tampoco puedo decir que tiene una buena dirección de personajes, pero no cabe duda de que Satoshi Kon dirigió muy bien a los animadores para que Mima esté llena de vida.

En cambio Darren Aronofky es un autor con todas las letras, lo que se traduce a películas con muchísima personalidad. Dudo mucho que otro director hubiera puesto en práctica ideas como la visión de Nina a través del agua o la escena lésbica, y mucho menos, lo hubiera hecho con tanta calidad.

Ambos tienen un nivel excelente, pero muy ligeramente, gana Cisne negro.




Conclusión
Cada película tiene un estilo particular, por lo que una no se pisa a la otra, si no que se pueden ver perfectamente como dos interpretaciones de una misma historia. Con no mucha diferencia, pero gana el remake.


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